El gasto mundial en TI crecerá un 5,1% en 2023, según Gartner
De acuerdo con la firma de análisis, el gasto alcanzará los 4.600 millones de dólares el próximo año, lo que supone un aumento del 5,1% respecto a 2022.
Como respuesta a la incertidumbre económica que vivimos en estos momentos, las empresas impulsarán nuevas iniciativas digitales para el año 2023. Así lo espera la firma de análisis Gartner, que asegura que el gasto en TI de las empresas es inmune a los momentos de recesión, ya que “los directores generales y los directores financieros, en lugar de recortar los presupuestos de TI, están aumentando el gasto en iniciativas empresariales digitales", apunta John-David Lovelock, analista de la compañía. Así, aunque "las turbulencias económicas cambiarán el contexto de las inversiones en tecnología, aumentando el gasto en algunas áreas y acelerando los descensos en otras, no se prevé que tengan un impacto material en el nivel general del gasto tecnológico de las empresas".
No obstante, según Lovelock, “la inflación ha recortado el poder adquisitivo de los consumidores en casi todos los países del mundo hasta el punto de que muchos consumidores están aplazando las compras de dispositivos de 2022 hasta 2023, lo que hará que el gasto en dispositivos disminuya un 8,4% en 2022 y un 0,6% en 2023."
Tendencias
De acuerdo con Gartner, hay algunas tecnologías que se están manteniendo más estables, frente a aquellas que impulsan el negocio y que cuentan con una proyección mayor de cara a 2023. Así, por ejemplo, aunque existe un amplio mercado en los centros de datos, el nuevo gasto continúa desplazándose hacia las opciones en la nube.
Aunque en momentos de crisis o recesión en lo que primero se piensa es en reducir los costes, incluidos los de TI, una encuesta realizada por Gartner en julio de 2022 a más de 200 directores financieros descubrió que el 69% planea aumentar su gasto en tecnologías digitales. "Las empresas utilizarán la tecnología digital principalmente para remodelar su flujo de ingresos, añadiendo nuevos productos y servicios, cambiando el flujo de caja de los productos y servicios y adaptando la propuesta de valor de los productos y servicios existentes", apunta Lovelock.
